El espectacular hallazgo se ubica ya en las dependencias del Museo Arqueológico de Córdoba y pronto se iniciaran estudios exhaustivos sobre él


Algunos de los mayores hallazgos de la arqueología se han producido de manera casual e incluso trivial. Muchos son los ejemplos de estos azares del destino, véase la conocida como Dama de Elche, escultura de arte íbero encontrada durante la realización de unos trabajos agrícolas en la zona de la Alcudia, en Elche (Alicante), o el conocido como Toro de Arjona, otra muestra de arte íbero hallada de forma casual.  

Ahora, y de nuevo de forma casual, sale a la luz lo que probablemente sea una de las muestras de escultura íbera mejor conservadas hasta la fecha. Se trata de la bautizada como la “Leona de Córdoba”, escultura hallada por Gonzalo Crespo, un vecino de San Sebastián de los Ballesteros, en un olivar ubicado en el término municipal de La RamblaLa figura, con un detallismo espectacular, parece representar a una leona o una loba en plena escena de caza, dando cuenta de un carnero ya abatido. La fisionomía de la figura y su inmejorable estado de conservación ha permitido a los arqueólogos de la Junta de Andalucía,  ya desde el inicio, adscribir la figura al siglo VI a.C.

El espectacular hallazgo se ubica ya en las dependencias del Museo Arqueológico de Córdoba y pronto se iniciaran estudios exhaustivos sobre ella. Esperaremos poder disfrutar muy pronto de los resultados alcanzados.

La escultura íbera, en su conjunto, presenta unos rasgos bien definidos, en los que se aprecia una importante influencia orientalizante con componente griego y un sustrato cultural autóctono innegable, propio de la idiosincrasia de esta cultura. Así, se percibe una falta de proporción armónica más característica de la escultura griega, y unos motivos que pueden, a grades rasgos, dividirse en dos temas: las figuras humanas y las figuras de animales. Al primer grupo pertenecerían estatuas como la Dama de Baza y al segundo aquellas otras como el Toro de Arjona o el reciente hallazgo de la Leona de Córdoba. En la representación de animales tiene cabida también la de animales fantásticos o mitológicos como esfinges o grifos (véase la Bicha de Balazote).

No cabe duda de que hallazgos como el actual permiten seguir profundizando en el conocimiento de una de las culturas más importantes de la antigüedad, y acrecentar nuestro conocimiento sobre el mundo antiguo y clásico. Si hasta ahora no habéis tenido ocasión de visitar el maravilloso Museo de Córdoba y su muestra de escultura antigua, pronto tendréis una nueva escusa para dejaros caer por allí y disfrutar de la ciudad y de lo que tiene para ofrecer.