Nacido en 1995 en Murcia, Hugo Rebel es un artista multidisciplinar que explora las capacidades terapéuticas del autorretrato a través de la performance y la fotografía. Su obra centrada en el autorretrato gira en torno a términos como el álter ego, la sexualidad, la catarsis, cuestiones identitarias y el ritual. Además de formarse en Bellas Artes entre la Universidad de Murcia y la Universidad de La Laguna (Tenerife), ha participado en festivales internacionales como Forma y Sustancia V o Cuerpo Urbano en Acción y formado parte de exposiciones colectivas en The Holy Art (Londres) y MundoArti.

Hugo Rebel
Hugo Rebel

Artista multidisciplinar graduado en bellas artes por la Universidad de Murcia y de la La Laguna (Tenerife). Le caracteriza un interesante exploración de las capacidades terapéuticas del autorretrato a través de performance y fotografía.
Su trabajo ha llegado a festivales como son: Forma y Sustancia y Cuerpo Urbano, además de formar parte de exposiciones colectivas a nivel europeo.


Pregunta. Hugo, es muy interesante cómo trabajas el autorretrato desde diferentes disciplinas. Además, nos comentas que lo realizas con fines de investigación en cuanto a la terapia que te ofrece esa vía de creación, ¿Qué te hizo trabajar estos temas tan autobiográficos y personales?

Respuesta. En primer lugar, muchas gracias, siempre es agradable que tu trabajo resulte interesante. Comencé a darme cuenta de que el arte era una herramienta terapéutica muy poderosa cuando comencé a estudiar Bellas Artes en la universidad: en ese momento me encontraba en terapia con un psiquiatra, fui diagnosticado con un trastorno de personalidad a causa de problemas de acoso y discriminación (entre otros) que sufrí desde que era un niño hasta los 16 años aproximadamente. Me encontraba con miles de conflictos mentales y absolutamente perdido, sin embargo, fue comenzar la carrera y durante el primer curso tanto el psiquiatra como yo vimos una mejoría impresionante. Ocurrió una especie de resurrección. Ahí me di cuenta de que el arte era una especie de salvación y decidí enfocar todos mis proyectos en esa línea.

P. El color está muy presente en tu trabajo de performance y fotografía ¿tiene esto un porqué que puedas compartir con nosotros? De ser así, ¿Cómo creas las paletas de color o la simbología de tus obras?

R. El color y su simbología están presentes en la vida de todos los seres humanos, ya sea de forma individual o ya sea como códigos sociales y, obviamente, mi obra no podía ser menos. Digamos que utilizo dos estéticas totalmente opuestas pero que fluyen entre sí: una muy colorida que recuerda un poco a la fotografía de moda y al mundo del espectáculo en la que suelo utilizar mucho el color rosa y otra bastante oscura en la que trato temas como el álter ego y su relación con el pasado y el dolor. La simbología está bastante sujeta a las cuestiones identitarias, sobre todo de género, sin embargo creo que en mi caso tiene más peso que, tanto el uso de colores muy llamativos y variados como el uso de colores que recuerdan más a algo doloroso o incluso el monocromo, son un reflejo de lo que llevo dentro. De hecho, opino que, aunque un artista no trabaje el autorretrato como tal, siempre se está autorretratando de forma indirecta a través de los colores, las formas, las temáticas que trabaja, etc…

Jamás debéis reprimir vuestro arte y vuestros sueños, pues todo eso es brillo y el brillo existe para eso mismo: brillar.

P. Tus performance están relacionadas con un alter ego, “Crimson Christ”, ¿puedes contarnos de dónde procede esta figura en tu trabajo?

R. Crimson Christ nació de un diario que escribí con 12 años aproximadamente, el cual lo dediqué enteramente a expresar todo lo que estaba pasando y mis sentimientos más duros. Es un diario bastante duro de leer ya que está escrito por un niño que incluso pensó en quitarse la vida. Sin embargo, la relación con mi álter ego se encuentra en que, con Crimson Christ, el concepto, la estética, los sentimientos y mi forma de “enfrentarme” a la sociedad, era todo con lo que me identificaba en mi adolescencia. Siempre me vi obligado a reprimirlo, a no llevarlo a cabo al completo, y en este diario, tanto la estética de Crimson como el concepto y los sentimientos, se van describiendo de forma indirecta a lo largo del diario. La forma que tengo de utilizar a mi álter ego como terapia es, sobre todo, a través de la performance, donde tengo dos objetivos esenciales: conseguir una catarsis a través del uso de rituales y darle a ese niño y adolescente que fui todo lo que necesitaba y el mundo no le dejó expresar.

P. Respecto a tu línea erótica en autorretrato, ¿Qué intencionalidad esconden estos trabajos?

R. La fotografía erótica es algo que me ha fascinado desde siempre, tanto los autorretratos como fotografiar a otras personas. A través de un autorretrato erótico, ya tengo un carácter más o menos artístico o más o menos original, es una forma de conocerte en el ámbito sexual y además de conectar ese autorretrato con tus propias experiencias, tenga o no que ver con la sexualidad. Digamos que es una forma de entenderte a través de la sexualidad y, por supuesto, como todo el arte, una forma de sacar fuera todo lo que llevas dentro.

P. ¿Dónde encuentras la fuente de inspiración?

R. Suelo tomar como referencia a artistas que están relacionados con las artes escénicas o la música, artistas como Diamanda Galás, Norma Mor, Ron Athey o Angelica Liddell. También me inspiran muchísimo la música metal y la música pop, así como la estética gótica, la arquitectura barroca y la ópera. Por último, y aunque suene raro, las flores y las mariposas me han transmitido siempre muchísimas sensaciones desde que era un niño.



P. ¿Qué consejo podría dar a los artistas que lean Negromundo?

R. Que jamás se dejen hundir o sientan que su trabajo es menos que el de otra persona. Sólo tú mismo sabes en qué punto de tu carrera estás, las ganas que le estás poniendo y, por supuesto, que nadie sabe defender mejor su trabajo que tú mismo.

P. Seguro que a los lectores de Negromundo les gusta saber en qué proyecto o serie estás ahora mismo inmerso. Cuéntanos, ¿es fotografía?, ¿performance…?

R. Actualmente me encuentro viviendo en Tenerife y desarrollando un proyecto centrado en la performance y en el álter ego. Podemos entenderlo como la continuación de una performance que titulé Brillo Profundo y que formó parte de la quinta edición del festival internacional de performance Forma y Sustancia, celebrado en Guatemala. Por otra parte, me encuentro desarrollando un proyecto que va más relacionado con la comedia, con un personaje nuevo.



P. Hugo, nos gustaría conocer tu opinión: ¿Cómo el arte puede ayudar a dar visibilidad al colectivo LGTIBQ+?

R. El arte es la mayor arma que existe en cualquier ámbito, es el reflejo de la sociedad, el reflejo de la cultura y no tiene límites. Por tanto, a través del arte, todas las personas que formamos parte del colectivo LGBTIQ+ nos hemos expresado, manifestado y conseguido los derechos que a toda persona le corresponden. No somos la obra a la que mirar como espectador y de la que opinar, somos la persona, somos la artista.

P. Cuéntanos lo que quieras.

R. Más que contar algo, me gustaría dar un consejo a todas las personas que lean esta entrevista. En mi obra, y en mi vida en general, he utilizado el brillo como una metáfora. Fui una persona a la que la sociedad consideraba objeto de burla, algo que había que corregir y algo incomprensible a lo que había que dejar a parte. Ahora todo eso: mi arte, mi forma de entender la vida y el no reprimir nunca nada de lo que soy, es la razón por la que brillo. Jamás debéis reprimir vuestro arte y vuestros sueños, pues todo eso es brillo y el brillo existe para eso mismo: brillar.


Sitios oficiales del artista:

https://www.instagram.com/hugo.rebel/
https://www.instagram.com/behind.rebel/