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Nació en la ciudad de Cagua (Venezuela) el 25 de febrero de 1992, Miguel Figueira destacó, desde temprana edad, por su sensibilidad y forma particular de ver las cosas; estudió pintura en la Academia de Arte Blú durante 8 años llegando a dominar las técnicas de carboncillo, óleo y acuarelas, participando en varias exposiciones en la Casa Guipuzcoana de su ciudad natal.
Su inquietud por las artes y el diseño le hicieron formarse como arquitecto en la Universidad Santiago Mariño en Maracay, obteniendo el título en el año 2013. Paralelamente estudió fotografía en la Escuela de Talleres Pixel en Valencia, despertando en él su verdadera vocación, donde aprendió a capturar e inmortalizar la esencia de cada individuo u objeto y dejando plasmado el instante mágico contando la historia en imágenes que serían recordadas para siempre.
Más tarde viajaría a Madrid a formarse como fotógrafo profesional, realizando el Master de Fotografía y Postproducción en la escuela Too Many Flash.
Pregunta. Miguel, hemos podido ver que desde muy pequeño ya tenías inquietudes artísticas, ¿tienen un porqué estas inquietudes tan tempranas?
Respuesta. Desde muy pequeño sentí la necesidad de expresarme a través del arte ya que en mi país la sensibilidad en los chicos era poco común y encontré en las artes plásticas una forma de liberar y comunicar mis sentimientos.
P. Tus últimos trabajos giran en torno a la libertad y el auto-conocimiento a través de la sexualidad y la exploración del desnudo. ¿Es esta tu línea de trabajo con la que te sientes más identificado? ¿De ser así podríamos estar viendo las bases de lo que será el futuro Miguel Figueira?
R. Siento una gran atracción hacia el desnudo porque encuentro en lo natural una forma de expresar emociones en el ser humano. La ropa impide esa libertad genuina.
Soy curioso como un gato, me gusta investigar en el desnudo y descubrir en cada rincón de piel una historia que contar; además, me gustan las pieles maduras, donde la experiencia de la vida ha marcado su paso. Pero considero el desnudo solo una parte de mi trabajo.
P. Miguel, en el trabajo de todo creador podemos encontrar normalmente parte de él, de sus preocupaciones, de sus inquietudes… ¿Te ves representado en esta descripción? Por otro lado, ¿dónde encuentras la inspiración para tus proyectos?
Sí, me veo representado. Me gusta observar y plasmar instantes; además, siento que una parte de mí se queda impresa en mis imágenes.
La inspiración surge de forma natural y espontánea, usando mis fotos como un lenguaje para comunicarme con el espectador. Pero me gusta también que cada uno interprete mi trabajo desde su perspectiva de vida.
P. En tu proyecto “Amor X” el retrato y el color crean un equilibrio muy interesante, nos encanta ver la intención de divulgación con la que creaste el proyecto. ¿Podrías explicarnos donde nace la idea de este proyecto? Por otro lado, ¿con qué objetivo decidiste las paletas de color que ibas a usar?
Sentía mucha curiosidad por explorar e identificar las diferentes orientaciones sexuales, dejando plasmado de una forma más visual ese sentimiento desde el punto de vista afectivo.
Cada imagen tiene un color en específico, de acuerdo a la definición y sentimiento de esa orientación. Por ejemplo, la demisexualidad se define como una atracción sexual donde el deseo es más fuerte a medida en que se conoce más a la persona. Por esa razón, el sentimiento del amor lo definí con el color rojo; sin embargo, la fraisexualidad es todo lo opuesto a la demisexualidad y el color que simboliza la frialdad es el azul.
Por Miguel Figueira
P. Para alguien que trabaja el retrato la relación con sus modelos es sumamente importante. ¿Qué relación tienes con los modelos de tus proyectos? ¿Cómo decides qué rasgos y fisonomía encajan dentro de tus ideas?
Siempre me interesa que mis modelos sean personas que se salen de lo convencional, me gusta ser portavoz de su mensaje, expresar su sentimiento fuera de lo “normal”, les admiro y me gusta su genuinidad.
Todos mis modelos tienen algo que expresar, por lo tanto, sin importar sus rasgos y fisonomía, todos encajan en mis ideas y me gusta captar su grito de libertad.
P. Tu proyecto “Leather night club” retrata los límites que solemos poner a nuestra naturaleza y fantasías más íntimas, nos resulta muy valiente un proyecto con esta filosofía. ¿Cuál ha sido tu mayor limitante respecto a este proyecto?
Nunca he tenido limitaciones para ser yo mismo, para expresar lo que me gusta y explorar otras formas de entender la sexualidad y el amor; después de explicar a mis modelos lo que busco, conectamos con buen feeling y simplemente les dejo ser para que todo fluya en armonía.
Soy curioso como un gato, me gusta investigar en el desnudo y descubrir en cada rincón de piel una historia que contar
P. ¿Qué consejo podrías dar a los artistas que lean Negromundo?
Ser ellos mismo y que exploren cada sentimiento de forma libre sin sentirse culpables o cohibidos al hacerlo, ya que, cada día, la sociedad y nosotros mismos nos ponemos límites y restricciones.
P. Miguel, nos gustaría conocer tu opinión: ¿Cómo el arte puede ayudar a dar visibilidad al colectivo LGTIBQ+?
El arte es un lenguaje que trasmite sentimientos y emociones. No hay que verlo solo en blanco y negro, sino reconocer todo un arcoíris de colores que enriquece al ser humano y dar visibilidad a las muchas formas de amar.
P: Cuéntanos lo que quieras.
Me gusta explorar todos los rincones de mi mente, dejando fluir todas las emociones, sensaciones y sentimientos y haciendo uso de mis habilidades, crear nuevos proyectos de temática sexual que serán plasmados a través del poderoso lenguaje de la imagen.
Doy gracias a Negromundo por esta oportunidad de poder expresarme y, además, de dar visibilidad a mi trabajo.
Sitios oficiales del artista:
https://www.instagram.com/figueiraphoto/
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